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14.7.09

Única

Si me pongo a pensar en la persona indicada para mí, tengo que pensar en alguien que sea igual a mí, o por lo menos que tenga una parte de mí.
Por empezar, tendría que tolerar todas mis locuras. Todas las cosas que digo, todas las cosas que hago, todas las cosas que pienso. Tendría que tolerar todas esas cosas que pienso, pero me callo, siempre por miedo. Esa persona tendría que aceptar mis miedos a las cosas que no son comunes, y mis fobias. Tendría que siempre estar ahí para mí.
Tendría que hablar en exceso problamente, y reírse como bruja. Y reírse en silencio, y con caras raras. Debería desafinar cuando canta, tendría que andar siempre descalza. Tendría que andar siempre gritando, a todos. Tendría que estar siempre con mala cara, pero tendría que ser lo más chistoso que encontras en alguien tan chica.
Tendría que odiar la luz y amar dormir hasta tarde. Tendría que cancelar cosas 'divertidas', para seguir soñando. Tendría que vivir soñando. Tendría que estar siempre, soñando despierta.
Tendría que amar a su familia, a pesar de todos sus defectos. Tendría que gustarle quedarse en su casa, haciendo nada. Tendría que ser aburrida, como yo. Tendría que encantarle leer hasta tarde, tendría que gustarle la historia y el inglés. Tendría que amar la música, más que a la vida propia. Tendría que odiar ir a comprar ropa, y más con su mamá. Tendría que ser un estúpida en el amor, y aceptar todas las cicatrices del pasado. La persona indicada para mí, tendría que amar la vida, a pesar de todos los golpes que le dió. Esa persona, tendría que ser idiota. Tendría que ser mentirosa y egoísta. Tendría que ser una rebelde en potencia con aspiros a punk. Tendría que sentirse libre, a pesar de todas las cosas que la atan y la tienen prisionera. Tendría que odiar por segundos, pero amar por años. Tendría que creer en los astros, pero no en el cielo. En el horóscopo de la revista del domingo, en el horóscopo chino. Tendría que divertirle la poesía, y permitirse llorar mirando una película, escuchando música, leyendo un libro.
Esa persona, tendría que ser vaga, pero inteligente, y a la vez muy orgullosa. Tendría que insultar sin razón. Tendría que aspirar a ser una estrella de rock, pero al mismo tiempo, amaría vivir de hacer reír a la gente. Tendría que ser alguien que defienda sus ideales, alguien completamente loca. Alguien que no juzga por las apariencias, y no se deja llevar por los demás. Alguien que sigue sus convicciones y no se hace pisar. Alguien que acepte que la traten mal, sabiendo que eso, también está mal. Pero es una persona que ama y perdona. Alguien que resonga, pero no es rencorosa. Alguien que es sociable, pero tímida a la vez. Alguien que se sonroja fácil, y no sabe disimular. Alguien que odie a los políticos, alguien con muchos complejos. Alguien que, le gusten las pastas, pero no le guste comerlas. Alguien nunca besado. A quién nunca han amado. Alguien a quién consideren rara, alguien a que le guste hablar de sí misma, sin que le importe que piensen que es una excéntrica. Alguien que se tome las cosas a pecho, alguien que se tome las cosas en serio. Alguien chismoso, algo saparrastroso. Alguien que tenga secretos, pero no tan oscuros. Esa persona, no tendría que importarle lo que digan de ella. Alguien que sea compañera, y bondadosa. Alguien que disfrute leyendo las cosas que yo escriba, alguien que se sienta orgullosa de todo lo que hace. Alguien que no se arrepienta, que aprenda a dejar el pasado al lugar donde corresponde, a pesar de que le cueste. Aceptar como es. Amarse. Estar orgullosa de la persona en la que se convirtió. Alguien que crea en el destino. En el Universo y no en alguna estampita y en ninguna cruz.
Pero, por esas cosas de la vida, no existe una persona así. O bueno sí, pero no hay otra como yo. Por que soy irreparablemente, única.